El martes asistí como invitado al acto de presentación del congreso San Sebastian Gastronomika 2011, que se celebrará en esta ciudad del 20 al 23 de Noviembre. Muy donostiarra la presentación, con el Palacio de Miramar y el marco incomparable de la bahía incluidos en la misma. Buena asistencia, gente elegante, bastantes trajes para lo que suele ser habitual en esta ciudad, y una amalgama de personas del mundo cultural y gastronómico, y también periodistas, políticos y otras gentes variopintas, entre las que me encontraba yo mismo, supongo que en calidad de bloguero relacionado con la gastronomía.
Y todo transcurrió con ritmo continuado. Primero, presentación del programa, este año con Mexico, Perú y Brasil como países invitados. Habrá fiesta mariachi, parrilladas brasileiras y mucho chile picante, y por supuesto, muchos cocineros de diferentes países, como Heston Blumenthal o Gastón Acurio, que mostrarán sus últimos descubrimientos en la cocina. Un programa, en principio, atractivo. Entendí que se podrán ver ponencias en la red. Muy acertado. A ver si es verdad.
Ya en la mitad del acto subieron al escenario ese grupo de cocineros repletos de estrellas michelin, y que, sumando sus esfuerzos, han puesto a la cocina vasca en lugar muy alto en el escenario internacional. Allí estaban Arzak, Arbelaitz, Subijana, Berasategi y Aduriz, implicados de lleno en el Congreso como asesores técnicos, y apoyando cuanta iniciativa permita consolidar esa imagen de gastronomía y cultura que proyecta la ciudad. Hemos tenido mucha suerte los donostiarras con esa generación de cocineros. Actuar desde lo local pero con mirada global.
Y finalmente, la presentación concluyó con las palabras de los políticos, siempre "tan amables y llenas de buenas intenciones", y un cocktail en el excepcional jardín del palacio. Buen rollo, buena educación, buen ambiente, ya os digo, muy donostiarra.
Todo invita a asistir al evento el próximo otoño ¿no os parece?
Podéis ver las fotos en este enlace
Sobre la receta de hoy tengo que decir que es uno de mis platos favoritos. Además, después de haber estado sometidas a veda durante varios años, ahora se encuentran en todas las pescaderías de la ciudad y los donostiarras, fieles a la tradición, damos buena cuenta de ellas.
No se deben freír mucho, para que queden jugosas, y se condimentan con ajos, guindilla y perejil. Sin embargo, y saltándome un poco las reglas, os las presento un poco más torraditas porque así nos gustan en casa.
Buena semana
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