Recomendable no hacerla a no ser que queráis complicaros la vida. Es una receta compleja, con muchos procesos que poner en marcha, pero también hay que decir que el relleno y la salsa de marisco merecen la pena.
Lo más pesado es separar la carne del centollo, un proceso laborioso y el que hay que poner mucha atención para no dejar cáscaras del marisco entre la carne desmigada. Muy importante este tema porque la dentadura de los comensales está en juego.
Ese relleno puede servir para muchas cosas, pimientos por ejemplo, si bien en esta ocasión lo he utilizado para rellenar esta lasaña de pasta.
Buena semana
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Lo más pesado es separar la carne del centollo, un proceso laborioso y el que hay que poner mucha atención para no dejar cáscaras del marisco entre la carne desmigada. Muy importante este tema porque la dentadura de los comensales está en juego.
Ese relleno puede servir para muchas cosas, pimientos por ejemplo, si bien en esta ocasión lo he utilizado para rellenar esta lasaña de pasta.
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5 comentarios:
De chuparse los dedos....
Esta será la reina de las lasañas...
Receta de domingo, tiene una pinta estupenda, aunque qué laboriosa!! Por cierto Josemari, por qué no pones recetas de legumbres nunca? Estoy seguro de que haces unas alubias de tolosa, o un cocido madrileño de campeonato! Un abrazo!
Ya lo creo que es complicada, verdadera obra maestra de artesanía es esta maravillosa lasaña, pero qué buena debe de estar¡¡¡¡¡
Me encantan los colores de tu paso a paso.
Se ve exquisito, muchas gracias por la receta!
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